Dormir fresco

Claves para dormir fresco en verano: trucos eficaces para un descanso sin calor

🌙

El verano puede traer días maravillosos, pero también noches en las que conciliar el sueño se convierte en un desafío. El calor excesivo interrumpe los ciclos del sueño, genera sudoración y te obliga a dar vueltas en la cama durante horas. Afortunadamente, existen soluciones prácticas que puedes aplicar desde hoy. Te compartimos las claves definitivas para dormir fresco en verano y despertar realmente descansado.

1. Elige un colchón y somier transpirables

La base de un descanso fresco comienza por una buena ventilación. Un somier articulado con lamas de madera de haya vaporizada permite el paso del aire y evita la acumulación de calor. Acompáñalo con un colchón transpirable, de materiales como viscoelástica con gel o muelles ensacados, que facilitan la disipación del calor corporal.

2. Ropa de cama ligera y natural

Di adiós a las sábanas de poliéster. En su lugar, utiliza tejidos naturales como el algodón, el lino o el bambú. Son más frescos, absorben mejor la humedad y permiten que la piel respire durante la noche.

3. Duerme con una postura que favorezca la circulación

Elevar ligeramente las piernas o el tronco puede ayudarte a dormir más fresco. Si tienes una cama ergonómica o articulada eléctrica, aprovecha esta función para mejorar la circulación y reducir la sensación de hinchazón o bochorno.

4. Cierra persianas y ventila estratégicamente

Durante el día, mantén las persianas bajadas para evitar que el sol caliente la habitación. Por la noche, abre ventanas cruzadas para generar corriente. Si puedes, instala un ventilador en modo nocturno para mantener una brisa constante y silenciosa.

5. Cuida lo que cenas (y cuándo cenas)

Evita las comidas pesadas, picantes o muy calientes antes de dormir. Opta por cenas ligeras y refrescantes (ensaladas, frutas, proteínas magras) al menos dos horas antes de acostarte para que tu cuerpo no trabaje de más durante la noche.

6. Dúchate con agua tibia antes de dormir

Aunque parece lógico ducharse con agua fría, lo más efectivo es una ducha con agua ligeramente tibia. Esto ayuda a regular tu temperatura corporal y provoca un efecto de enfriamiento progresivo cuando sales del baño.

🌿 Bonus: Aromaterapia y rutinas calmantes

Aceites esenciales como la lavanda o la menta pueden ayudarte a relajar y refrescar el ambiente. Úsalos en difusores o en sprays para almohada. Combínalo con una rutina relajante (luces tenues, lectura tranquila) para inducir un sueño más profundo.


✅ En resumen

Dormir fresco en verano sí es posible si eliges los elementos adecuados para tu descanso: una base transpirable, materiales naturales, buena postura y ventilación inteligente.

¿Buscas una cama ergonómica que te ayude a combatir el calor este verano?
🔗 [Descubre nuestras camas articuladas frescas y personalizables].

Puedes enviarnos un correo electrónico y resolveremos tus dudas.

Nuestro horario de atención telefónica es de 9:00 a 18:00 en días laborables

También resolvemos tus consultas a través de nuestras redes sociales.